Vibraciones personales propagándose por el Éter que impregna todo el espacio y todo el tiempo
POR JOAN EGEA BARBER
12/08/2022
EL ÉTER
En 1873 J.C. Maxwell publicó su tratado sobre electromagnetismo que sienta las bases de la Teoría del Campo Electromagnético o del éter. Tesla sentía fascinación por esta teoría de Maxwell.
La investigación de Tesla en torno al automatismo humano se apoya en todo momento en las Teorías sobre el Campo Electromagnético o Éter.
Tesla nos ofrece una perspectiva tecnológica del éter con una peculiar interpretación, al tratar de demostrar los principios universales por medio del automatismo humano.
Hoy podemos afirmar que allí donde muchos contiuan creyendo que solo existe el vacío, existe un campo de energía que impregna todo el espacio y todo el tiempo, del que, especialmente gracias a la ciencia, nos estamos volviendo cada vez más conscientes.
Aunque los detalles físicos todavía se están resolviendo sobre la naturaleza exacta de conceptos tales como energía de vacío, la idea de un campo unificado general de energía vibratoria electromagnética en forma de ondas, constituye un principio general que desde los inicios de la TCE continua vigente.
Este campo de energía constituye la matriz en la que existe toda la materia cuántica.
Para tratar de comprender la propagación de vibraciones a través del Éter, de un modo un poco más palpable, imaginemos, que si lanzamos una piedra o cualquier otro objeto al agua, podremos apreciar unas ondas circulares que se propagan desde el foco o lugar donde ha impactado la piedra.
Esta onda generada no transporta MATERIA (o sea agua), lo que transporta es ENERGÍA.
Al mismo tiempo, existe una frecuencia de vibración de la MATERIA (agua). Esta onda de vibración de las partículas de materia lleva una dirección perpendicular a la anterior onda de vibración de la ENERGÍA.
Los dos movimientos anteriores los podemos apreciar si situamos una boya en un lugar cercano del foco o lugar de impacto. La boya asciende y desciende VERTICALMENTE (MATERIA), según le llegan las ondas de energía en su desplazamiento HORIZONTAL (ENERGÍA).
De forma similar, el Teleautomatón genera dos clases de ondas perpendiculares. Por una parte, la onda senoidal armoniosa a la que tiende nuestros anhelos, una energía no materializada, y por otra parte, una onda resultado de la programación interna que hemos configurado en nuestro pasado, que en determinados casos nos programa de inadecuadas creencias mentales que tienden en sentido perpendicular e incluso opuesto a la de la onda de nuestro deseo emocional.
Cuando la onda de materia eléctrica de nuestro cerebro racional se pone de acuerdo, se sincroniza con la onda de energía magnética de nuestro cerebro emocional, las dos se vuelven una y queda manifestado nuestro deseo.
En la siguiente figura puedes ver una representación, como síntesis de esta propagación de las vibraciones en los autómatas humanos.
El fenómeno principal que se da en la propagación de ondas electromagnéticas es el de resonancia, en forma de un tren de ondas creándose y recreándose como un eco, de forma similar a las ondas en el agua descritas anteriormente.
El movimiento de atraer o repulsar nuestro deseo es el resultado de la resonancia de las siguientes tres fuerzas, desplazándose por medio del Éter:
- EJE HORIZONTAL INPUTS: El eje horizontal representa nuestra conducta presente, las ondas de nuestros inputs diarios. Entra en juego el inconsciente. En este presente reflejamos exactamente la vibración del sistema emocional. Equivale a la onda ENERGÍA.
- EJE VERTICAL OUTPUTS: El eje vertical representa nuestro propósito e intenciones. Representa el futuro y sus atractores.
- EJE PERPENDICULAR: El tercer eje representa nuestra programación, esquemas mentales y creencias que hemos ido configurando a través de nuestra historia de vida. Representa el pasado y está determinado por nuestro cerebro o sistema racional. Equivale a la onda MATERIA.
Las resonancias entre las ondas emocionales del presente (inputs) y las mentales del pasado van dando lugar a diferentes niveles de manifestaciones en nuestra realidad, que dan forma a nuestro futuro.
Este artículo se corresponde con uno de los capítulos del curso Teleautomatón, si te ha parecido interesante puedes ampliar información en el enlace de abajo.
Joan Egea Barber.
